CÓRDOBA | El gobierno de la provincia promueve el consumo de la carne de cordero

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El Gobierno de Córdoba, junto con el respaldo de otras instituciones, lanzó una campaña para el fomento de la producción y el consumo de cortes de cordero en la dieta alimentaria..

En ese marco recientemente se realizó la primera Degustación de cortes de cordero cordobés: carne magra de pasturas, organizado por el Ministerio de Agricultura y Ganadería; la Universidad Nacional de Río Cuarto (UNRC): el Instituto Nacional de Tecnología Agroalimentaria (INTA) y representantes del denominado Proyecto Utuco, de donde nace la iniciativa.

El ministro Sergio Busso, junto a Alejandra Casas, ganadora del Concurso Nacional de Mujeres Asadoras en Marull y Embajadora de la marca del «Mejor Asado del Mundo» de la Municipalidad de Jesús María;

El ministro de Agricultura y Ganadería, Sergio Busso, dijo que “es importante consolidar una cadena productiva que es incipiente, pero con un gran futuro y Córdoba tiene una propuesta con valor agregado”, y en ese sentido destacó el trabajo conjunto entre el sector público y privado.

Desde la cartera precisaron que las acciones que se están realizando con el plan buscan incidir «en la matriz productiva e impulsan una redefinición en la cadena ovina provincial que mejora la sustentabilidad en el territorio en términos económicos, sociales y ambientales”.

Aseguraron que el cordero cordobés es un ejemplar de “carne magra de pasturas”, criado por productores que se esfuerzan en mejorar genéticamente sus majadas, apostando a razas netamente carniceras alimentadas sobre pasturas que les permiten alcanzar más eficiencia, cuidando el medio ambiente y el bienestar animal.

Exquisitez y tradición, el asado en Córdoba, protagonista de los fines de semana en la provincia.

También enfatizaron que la carne de cordero contiene propiedades únicas referidas a terneza, jugosidad, consistencia y una suave textura, que se pueden reconocer en cada corte disponible para incorporar la carne ovina a todas las preparaciones que se puedan imaginar, tanto tradicionales como innovadoras.

Además apunta a incentivar la producción ovina mediante un sistema eficiente y sostenible que permita un negocio formal y rentable, y que en ese sentido se trabaja en mecanismos para aumentar la tasa de reproducción y la velocidad del crecimiento.