Un policía vestido de civil mató a balazos a dos hombres armados que irrumpieron con fines de robo en un comercio que atiende un miembro de su familia en la zona noroeste de la ciudad de Rosario, informaron hoy fuentes judiciales.
El hecho sucedió anoche, cerca de las 21.30, cuando dos personas a bordo de sus motos se detuvieron en la calle Brasil al 500 bis, del barrio Fisherton Industrial, e ingresaron a un almacén ubicado en esa cuadra.
Una vez adentro, los hombres exhibieron armas y amenazaron a empleados y clientes para que les entregaran dinero y la recaudación del negocio, según dijeron los voceros.
En ese momento, un policía de 27 años, que estaba vestido de civil en el almacén, ya que un familiar suyo lo atendía, decidió intervenir y con su arma reglamentaria disparó contra los ladrones para evitar el robo.
A raíz de los disparos ambos delincuentes cayeron muertos en el lugar, mientras que un vecino de 50 años resultó herido al ser alcanzado por un proyectil, por lo que debió ser trasladado al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca), donde se confirmó que recibió un impacto en la zona del tórax, aunque se encuentra fuera de peligro.
En tanto, el episodio fue denunciado al 911, por lo que minutos más tarde se hicieron presentes en el lugar personal policial y una ambulancia del Sistema Integrado de Emergencias Sanitarias (Sies), cuyos médicos confirmaron la muerte de de los delincuentes.
El caso es investigado por la fiscal de la unidad de Homicidios Dolosos, Georgina Pairola, quien solicitó la intervención del Gabinete Criminalístico de Gendarmería Nacional y de la Agencia de Control Policial para que realizaran las primeras tareas en el lugar.
En ese marco, los agentes hallaron una pistola calibre 380 que se encontraba junto al cuerpo de uno de los fallecidos, por lo que fue secuestrada al igual que el arma del policía de civil, ya que ambas serán peritadas.
Asimismo, la fiscal ordenó el traslado de los cuerpos al Instituto Médico Legal, donde se les practicará la autopsia correspondiente, a fin de reconocerlos y obtener mayor información.
Pairola dispuso además que el oficial quede en libertad al considerar que actuó en legítima defensa ante dos delincuentes armados, quienes, en principio, no habria llegado a disparar, añadieron las fuentes.