Los titulares de los sindicatos, detallan el impacto en Fiat y Renault, mientras el sector enfrenta una recesión y políticas gubernamentales ortodoxas. El golpe económico, también afecta a los proveedores periféricos de la industria.
La crisis económica, impulsada por las medidas del gobierno de Milei, golpea con fuerza a la industria automotriz en Córdoba, afectando a trabajadores y sectores relacionados.
En una nota publicada en el medio La Nueva Mañana, tanto Javier García Magna, del Smata, como Rubén Urbano, de la UOM, brindan detalles alarmantes sobre la situación.
En el caso de Fiat y Renault, las dos principales automotrices de la región, la situación es preocupante. García Magna destacó que la producción del modelo Cronos en Fiat se ve amenazada por la reducción de horas extras y la posibilidad de suspensiones debido a la situación económica. Mientras tanto, Renault ha implementado suspensiones y trabaja en un solo turno, lo que ya ha resultado en la pérdida de entre 200 y 300 puestos de trabajo, principalmente a través de retiros voluntarios y jubilaciones anticipadas.
El impacto se extiende más allá de las plantas, afectando a autopartistas y otros sectores vinculados. Esta crisis genera un efecto dominó que alcanza desde los trabajadores directamente afectados hasta los vendedores ambulantes cercanos a las fábricas. La incertidumbre y el temor son palpables entre los trabajadores, como lo refleja el testimonio de Oscar Vesco, un transportista afectado por la situación.
Rubén Urbano, de la UOM, coincide en el análisis preocupante del presente en la industria automotriz. Señala que, si bien se intenta evitar despidos, la falta de renovación de contratos y los retiros voluntarios actúan como despidos encubiertos. Además, advierte que la falta de expectativas de un repunte económico y la ausencia de políticas gubernamentales efectivas agravan la situación.
En resumen, la industria automotriz de Córdoba enfrenta una crisis profunda, con consecuencias devastadoras para los trabajadores y la economía regional. La falta de perspectivas de mejoría inmediata y la necesidad de políticas industriales efectivas son los principales desafíos que enfrenta el sector.
Gonzalo Goro – Diario de Punilla | Fuente: LNM