El Consejo Provincial Indígena de la Provincia de Córdoba MANIFIESTA y RECLAMA la falta de consulta a los pueblos indígenas de acuerdo a leyes provinciales y nacionales e internacionales, en la toma de decisiones con respecto a la situación de nuestros montes y por la destrucción a causa de los incendios.
El 29 de Agosto de 2020, en una entrevista el Secretario de Ambiente Juan Scotto, dice que la idea es elaborar un plan de Restauración Ambiental de zonas afectadas por los incendios, a la cual no fuimos convocados.
Nos pone en ALERTA lo publicado en el Boletín Oficial el 17 de Setiembre de 2020, la Resolución 227.
Exigimos su derogación.
Proponemos y estamos a disposición para elaborar una ley, la cual manifieste, que no se puedan realizar operaciones inmobiliarias ni agropecuarias por lo menos por 30 años en las tierras arrasadas por el fuego.
Hay antecedentes de siniestros de una magnitud igual o peor que la de este año, y eso deja en evidencia que no se ha tomado los recaudos ni la prevención, para que no vuelvan a suceder.
Características del monte y zonas afectadas por el fuego.
- Variabilidad.
- Por ejemplo, en la zona de Villa Albertina e Ischilín (empezó al este, en ruta 9 y se fue al oeste, acercándose a la ruta 38) zona de serranías bajas, de monte que sufre periódicamente el fuego. Aunque en algún momento tuvo árboles de más de 5 metros de altura y hoy es monte bajo y abierto, por la frecuencia del fuego que se combina con pastoreos. Pero no por eso, esos montes deben ser desestimados, están cumpliendo una función ecosistémica vital para sostenerla producción de pequeños productores ganaderos y de captación de agua y filtración de lluvias en el clima semiárido.
Consecuencias socio-ambientales.
Técnicamente se analiza a corto, mediano y largo plazo.
A largo plazo los incendios reiterados lo que hacen es que el ambiente en vez de recuperarse se vaya degradando: a un ambiente que tiene capacidad de regenerarse y restaurarse a sí mismo, no le damos tiempo y va perdiendo biodiversidad, funciones ecosistémicas y servicios ambientales de producción, de soporte y de regulación de los factores climáticos. Eso se observa en el tiempo. A corto plazo repercute directamente sobre la economía y la salud de los pobladores de la región.
En el caso del ganado, se muere, y el qué sobrevive no tiene oferta de forraje y muere por inanición. Entonces llega el empobrecimiento de las familias que no reciben apoyo. Ya que, si recibieran ayuda económica para sostener el ganado, eso le quita presión al sistema natural para que pueda regenerarse.
Otra consecuencia es la salud de las personas (que en situación de pandemia) que están respirando humo y cenizas. También hay que mencionar que muchas familias se alimentan de plantas y medicinas del monte, y lo que se quemó quizás rebrote el año que viene, pero este año la algarroba, el mistol, el chañar no van a dar frutos, y eso es algo que completa la alimentación, por su alto valor nutricional, y también se utiliza para alimentar el ganado.
Cómo podríamos colaborar a recuperar los territorios afectados por los incendios?
Recordemos que el fuego es parte y principio fundamental de la naturaleza, está presente en nuestro ecosistema, pero no con la frecuencia de estas últimas décadas. Sucede cada 100 años, 50 años, y el monte a lo largo de los miles de años de evolución se ha ido adaptando a ese disturbio natural, entonces tiene forma de reaccionar a él, a través del rebrote o de la resistencia de semillas: que el banco de semillas del suelo (Pachamama) sobreviva, es fundamental porque lo que va a dar la regeneración.
Otras esperarán la tercer o cuarta lluvia para rebrotar con fuerzas, como el espinillo, el molle, los cocos y algarrobos.
Podríamos hablar de distintas situaciones, si el monte ya sufrió mucho fuego, sobre pastoreo, extracción de leña, desmonte, le va a costar más, recuperarse. El monte tiene su sistema inmunológico, es un gran organismo, entonces depende su estado de conservación al momento del fuego. Por eso lo importante es darle tiempo al sistema natural a que se recupere solo, evitando nuevos fuegos (contrafuegos, limpia y marcado de caminos, límites claros, etc.), sobre pastoreo, y las especies exóticas invasoras.
“Hay un reconocimiento de que los fuegos son intencionales, y algunos accidentales, pero siempre de las manos de las personas, con más razón hay que trabajar en la prevención y el control”.