Un grave acto de vandalismo ha paralizado la obra de perforación para el suministro de agua potable en el Barrio Faldas del Uritorco. La comunidad, conmocionada por lo ocurrido, manifestó su repudio a través de las redes sociales, donde cientos de vecinos expresaron su indignación por el sabotaje que ha afectado directamente el progreso de una obra fundamental para la zona.
Luego de semanas de trabajo continuo, la obra de perforación para el suministro de agua potable en el Barrio Faldas del Uritorco, que se había iniciado el pasado 19 de agosto, fue cancelada debido a reiterados actos vandálicos. El día viernes, el equipo de geólogos de la provincia de Córdoba confirmó que no podían continuar con el sondeo y aforo debido a que la perforación se encontraba obstruida con piedras y otros materiales externos.
El personal de EMOSS ya había encontrado daños el domingo 25 de agosto, cuando encontraron la tapa de la perforación desoldada y abollada, a pesar de ser de un material de alta resistencia. Tras reparar el daño y reforzar la tapa con una cadena y un candado, el problema volvió a repetirse días después. El miércoles por la noche, el personal descubrió nuevamente la tapa abierta y sin candado. Sin embargo, el daño más grave se descubrió luego, cuando una gran cantidad de piedras había sido arrojada dentro de la perforación, bloqueando una bomba provisional e impidiendo su extracción.
Estos actos de vandalismo no solo representan una interrupción del proyecto, sino también una pérdida económica significativa para la comunidad y las autoridades. Las denuncias correspondientes ya han sido realizadas, y se espera que la investigación avance rápidamente para identificar a los responsables.
El repudio de los vecinos y la manifestación en redes sociales
Los habitantes del Barrio Faldas del Uritorco no han tardado en manifestar su descontento. A través de las redes sociales, la reacción fue contundente y masiva. Los vecinos repudiaron los actos vandálicos y señalaron que estos hechos no representan los valores de su comunidad. En una declaración emitida por la Comisión Vecinal del barrio, que cuenta con aproximadamente 1,000 residentes, los vecinos enfatizaron que las personas responsables de los ataques son ajenas al barrio.
«Repudiamos absolutamente estos actos vandálicos del 28 de agosto. Estos actos no reflejan nuestros valores como comunidad», expresaron los vecinos en su comunicado. Además, se comprometieron a trabajar conjuntamente para prevenir futuros incidentes y colaborar con las autoridades para llevar a los responsables ante la justicia.
La obra, considerada vital para garantizar el acceso al agua potable en la zona, queda cancelada, al menos hasta evaluar si se puedan resolver los daños ocasionados. Mientras tanto, la comunidad capillense, exige justicia.
Diario de Punilla