El Ministro de Cultura de la Nación, Tristán Bauer, el vicepresidente del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA), Argentores, la Multisectorial por la Ficción, el Trabajo y la Industria Audiovisual, referentes del arte y la cultura, grupos e instituciones saludaron la ley que garantiza la prórroga durante 50 años de las asignaciones específicas para las industrias culturales que aprobó hoy el Senado por amplia mayoría.
Con 57 votos afirmativos, solamente dos negativos y nueve abstenciones el Senado de la Nación transformó en ley la prórroga que llegó a la Cámara Alta con la aprobación de Diputados el 15 de junio pasado siguiendo un proyecto presentado por el diputado cordobés Pablo Carro del Frente de Todos.
«La de hoy es una decisión fundamental para la cultura argentina y se ha dado un paso extraordinario», destacó el ministro de Cultura de la Nación, Tristán Bauer, que siguió el desarrollo de la sesión del Senado en el recinto, apenas aprobada la ley, a Télam.
«Como todos saben -agregó- el gobierno de Mauricio Macri había sancionado una ley que quitaba al cine, las bibliotecas populares, la música y el teatro, estas asignaciones específicas y volvemos a tener ese financiamiento que es fundamental para el sostenimiento de la cultura nacional».
«La cultura no prescribe, la desarrollan los pueblos, los artistas contribuyen de manera extraordinaria a esa construcción colectiva y esta sanción que hoy es de 50 años yo creo que será para siempre porque es fundamental que el Estado esté acompañando al cine, a nuestro teatro, a tantos y tantos artistas, posibilitando las bibliotecas populares maravillosas que se levantan a lo largo y ancho del país», remarcó Bauer.
El funcionario destacó «el consenso que logró la ley entre las distintas organizaciones y ámbitos de la cultura argentina» y también que «estuvieron todos los artistas acompañando y militando esta ley para que fuera posible».
La ley aprobada hoy evita el desfinanciamiento de organismos como el Instituto de Cine, el del Teatro y el de la Música, y las bibliotecas populares de la Conabip, entre otros organismos, apostando a la consolidación de políticas de Estado en material cultural hasta 2072.
La propuesta anuló la modificatoria de la ley 27432, votada en diciembre de 2017 a instancias del gobierno de Mauricio Macri, que estipulaba que tanto el Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (Incaa), El Instituto Nacional del Teatro (INT), el Instituto Nacional de la Música (Inamu), las bibliotecas populares del programa Conabip y Radio Televisión Argentina (RTA) dejarían de recibir de manera directa fondos tributarios específicos a partir del 1 de enero de 2023.
Por su parte, Sergio Vainman, vicepresidente de Argentores y miembro del consejo ejecutivo de la Multisectorial Audiovisual por la Ficción, el Trabajo y la Industria Audiovisual, que reúne más de 25 organizaciones de la cultura, destacó a Télam que lo más importante de la ley es que «garantiza la continuidad de políticas publicas que se han venido sucediendo a lo largo de los años con gobiernos de distinto signo y que se veían amenazadas por la caducidad de la asignación de fondos específicos».
«La votación demostró claramente que esto es una cuestión transversal que afecta a todo el espectro político argentino sin importar su signo particular y que la cultura no es patrimonio ni interés de un partido político sino del pueblo argentino en su conjunto».
La Multisectorial, una de las principales organizaciones que trabajó por la sanción de la ley, había realizado este mediodía una conferencia de prensa en el Cine Gaumont donde, con la presencia de organismos e instituciones de la cultura, representantes del secretariado de la CTA y la CGT, quedó de manifiesto la unidad completa del sector y la convergencia por la continuidad de políticas públicas más allá de las líneas ideológicas de cada sector.
En tanto, el vicepresidente del Instituto de Cine en funciones de la presidencia, Nicolás Battle, destacó a Télam que la aprobación de la ley «es un paso muy importante. Entender que no solamente son los fondos que recibe el sector audiovisual, sino también el resto de las áreas. En ese sentido, es fundamental esta sanción. Desde el Incaa agradecemos al Senado por este paso adelante en estos fondos fundamentales para el cine nacional, los festivales, la formación en la Enerc y todos los programas que se llevan adelante con tanto esfuerzo».
Diego Boris, que fuera presidente del Instituto Nacional de la Música (Inamu) durante sus primeros dos períodos fundacionales y que dejó ese cargo meses atrás, destacó que «desde el sector de la música festejamos la aprobación de esta ley que garantiza por 50 años los fondos específicos para los órganos de fomento».
«A partir de mañana -agregó- empezaremos a trabajar para que otra ley que incluya a las plataformas digitales el porcentaje asignado esté en sintonía con lo que produce la actividad musical, más allá de esa situación hoy es un día para festejar que los fondos para el fomento de la cultura están garantizados».
«Estábamos medio desesperados y ahora estamos ahora ultracontentos, imaginate lo que hubiera pasado si hubiéramos perdido estas ayudas que permiten el desarrollo del teatro independiente argentino, que es una fenómeno único en el mundo, del cine nacional, de las bibliotecas populares», destacó por su parte la actriz Mirta Busnelli, fuerte impulsora de la aprobación de la ley.
«Además, hay que tener en cuenta que los fondos que van a estas industrias culturales no salen del presupuesto nacional ni se desfinancian otras actividades sino que surgen de impuestos específicos para la cultura como el de las entradas del cine para el fomento del cine argentino».
Juan Palomino, que acompañó todo el proceso y hoy estuvo también en el Senado señaló: «Celebramos este voto a favor del arte y la cultura; sin duda el de hoy es un paso hacia adelante con el que podemos reafirmar que el arte acompaña a la cultura y es una herramienta fundamental para cerrar heridas».
«Estamos contentos también porque se pudieron limar diferencias con los senadores de la oposición y llegar a un consenso; este es un buen ejemplo para entender que las políticas de Estado como las referidas a la educación, la salud, la cultura, los jubilados, la economía, son cuestiones que nos atañen a todos y ver la importancia de sostener organismos como el Instituto del Teatro, el del Cine, de la Música, las Bibliotecas Populares, que son la base de la red de espejos para proyectarnos al mundo mostrando nuestra identidad».
Fuente: Télam