Tropas rusas avanzaban hoy a sangre y fuego hacia el centro de una ciudad clave de la región del este de Ucrania que Rusia pretende conquistar, en medio de fuertes combates con el Ejército ucraniano, dijeron autoridades.
«Los rusos avanzan hacia la mitad de Severodonetsk. Los combates continúan, la situación es muy difícil», dijo el gobernador de la provincia de Lugansk, una de las dos que forman la región industrial del Donbass.
El gobernador, Sergii Gaidai, dijo en la aplicación de mensajes Telegram que dos personas resultaron heridas hoy cuando su vehículo recibió varios disparos, mientras que tres médicos se encontraban desaparecidos.
«La infraestructura crítica está destruida y el 60% de los edificios residenciales no puede ser reparado», agregó Gaidai, informó la agencia de noticias AFP.
El gobernador agregó que la ruta que une Severodonetsk con la ciudad gemela de Lisichansk y luego con la de Bajmut más al sur era demasiado «peligrosa» para permitir la evacuación de civiles y el transporte de ayuda humanitaria.
Severodonetsk se ha convertido en el epicentro de la batalla por el control del Donbass, una región fronteriza con Rusia integrada además por la provincia de Donetsk, al sur de Lugansk.
Separatistas prorrusos alzados en armas contra el Gobierno ucraniano controlan territorios ahora en expansión en el Donbass desde 2014, en los que proclamaron repúblicas que Rusia reconoció como independientes antes de invadir Ucrania, el 24 de febrero.
El canciller ruso, Serguei Lavrov, dijo ayer al canal francés TF1 que la «prioridad incondicional de Rusia es la liberación de las regiones de Donetsk y Lugansk», y agregó que para Moscú son «Estados independientes».
Severodonetsk es la ciudad más grande del Donbass de las que aún controla Ucrania.
Luego de bombardearla más de una semana y de imponerle un virtual cerco, las tropas rusas ingresaron a la ciudad el sábado y libraron los primeros combates, en la estación de colectivos, según dijo Gaidai.
Ayer se adentraron aún más en la ciudad y hubo enfrentamientos en las calles, de acuerdo a Gaidai, que dijo que la situación se «agravó mucho», sobre todo en Lisichansk, que fue fuertemente bombardeada.
El alcalde de Severodonetsk, Oleksandr Striuk, dijo ayer que la ciudad estaba sin luz ni telefonía celular.
Agregó que 1.500 residentes de la ciudad, que antes de la guerra tenía unos 100.000, habían muerto por los ataques y combates, por la falta de medicamentos y la imposibilidad de tratarse enfermedades.
Severodonetsk y Lisichansk están 80 kilómetros al este de Kramatorsk y de Sloviansk, las dos mayores ciudades de la provincia de Donetsk que siguen en poder de Ucrania. ||| Info: Télam