Liberan a Ibrahim Abdallah militante libanés preso 40 años en Francia

Georges Ibrahim Abdallah, condenado en 1987 por su vinculación con ataques contra diplomáticos, fue excarcelado y deportado a Líbano, donde fue recibido como símbolo de resistencia.

Francia liberó este viernes al libanés Georges Ibrahim Abdallah, uno de los presos más longevos del país, tras cumplir 40 años de condena por su presunta complicidad en los asesinatos de un diplomático israelí y un militar estadounidense en los años 80. Abdallah, de 74 años, llegó a Beirut, donde fue recibido por cientos de simpatizantes que lo aclamaron como un «combatiente» de la causa palestina.

El Tribunal de Apelación de París ordenó su liberación bajo la condición de que abandone territorio francés de manera definitiva. La decisión generó rechazo en Israel y Estados Unidos, países que consideran a Abdallah responsable de actos terroristas. Sin embargo, sus abogados sostienen que su prolongado encarcelamiento respondió a motivaciones políticas vinculadas al conflicto en Medio Oriente.

Un caso con raíces en la guerra libanesa
Abdallah fue condenado en 1987 por su pertenencia a las Facciones Armadas Revolucionarias Libanesas (FARL), un grupo que atacó intereses israelíes y estadounidenses durante la invasión de Líbano. Aunque siempre negó participación directa en los crímenes, se rehusó a condenarlos, calificándolos como «actos de resistencia».

Tras décadas de pedidos de excarcelación denegados, su liberación llega en un contexto de tensiones regionales. Al llegar a Líbano, Abdallah llamó a continuar «la lucha contra el enemigo», en un discurso que resonó entre seguidores de Hezbolá y Hamás.

Reacciones divididas
Mientras familiares y grupos propalestinos celebraron su regreso, Israel y EE.UU. criticaron la decisión francesa, argumentando que representa un riesgo para la seguridad. Su abogado, en cambio, insistió en que su cliente cumplió una pena excesiva en comparación con otros condenados por delitos similares.

Abdallah se dirigió a su pueblo natal, Kobayat, donde fue recibido con honores, cerrando un capítulo de cuatro décadas que mantuvo su figura en el centro del debate sobre justicia y conflicto político.

Redacción Diario de Punilla | Fuente El País (España)