En un clásico lleno de emociones, La Gloria superó la expulsión temprana de Godoy y dio vuelta el partido con goles de Luna y Puebla. Talleres despide su participación con más dudas que certezas.
El fútbol volvió a demostrar que nunca se rinde. Instituto, con el alma y un hombre menos durante 67 minutos, logró una victoria memorable ante Talleres (2-1) en el Kempes, asegurándose un lugar en los octavos de final de la Liga Profesional. Un partido que comenzó con todo en contra para el equipo de Alta Córdoba terminó convertido en un símbolo de resistencia y entrega.
Así se vivió el clásico
El encuentro arrancó con dominio de Talleres. A los 13 minutos, Matías Galarza abrió el marcador con un potente derechazo que no dio chances a Roffo. Para empeorar las cosas para Instituto, a los 23′ Matías Godoy vio la segunda amarilla y dejó a su equipo con diez.
Pero la Gloria no se achicó. En el último minuto del primer tiempo, Alex Luna apareció en el área para emparejar las cosas con un certero remate. Ya en el complemento, Talleres también quedó con un expulsado (Depietri, 60′), y el partido se transformó en un duelo de nervios.
El gol de la victoria llegó a los 80′, cuando Santiago Puebla aprovechó un córner mal despejado y su remate, con desvío incluido, venció a Guido Herrera. El Kempes estalló de alegría, mientras Talleres sumaba otro capítulo gris en su temporada.
Las claves del triunfo albirrojo
- Mentalidad ganadora: Jugaron más de una hora con un hombre menos y nunca bajaron los brazos.
- Aprovechamiento de errores: Talleres desperdició chances claras, como el 1 vs 1 que Palacios erró en el segundo tiempo.
- Heroísmo colectivo: Desde Roffo (3 atajadas clave) hasta Luna y Puebla, todos pusieron el pecho.
Redacción: Diario de Punilla | Fuentes: Prensa Instituto, La Nueva Mañana