El juicio que debía comenzar en noviembre del año pasado, y que se pospuso sin saber los detalles que motivaron el cambio de fecha, iniciará el día 2 de mayo en los tribunales de Cruz del Eje.
Si bien el proceso del juicio tendrá lugar en los tribunales de la ciudad de Cruz del Eje, contará con la actuación de la Cámara de Villa Dolores.
El motivo de sostener el lugar de audiencias se basa en la cercanía de quienes oficiarán de jurados/as populares y por encontrarse el imputado en el establecimiento carcelario de dicha localidad.
Sabemos que en el banquillo de acusados no estará el principal sospechoso según la querella que representamos. No vamos a permitir el encarcelamiento de un perejil.
Exigimos verdad y justicia por Cecilia, y no vamos a parar hasta que así sea, aseguraron desde el equipo de trabajo «Justicia por Cecilia Basaldúa», recordemos que la artesana Cecilia Basaldúa desapareció el 5 de abril en Capilla del Monte a la edad de 35 años.
Con domicilio en Buenos Aires, la joven artesana y escritora, había arribado a dicha localidad antes de la cuarentena con el objetivo de escribir un libro que reflejara sus viajes por Latinoamérica, luego de una experiencia reciente por el continente.
La búsqueda no daba frutos hasta que luego de 20 días de rastrillajes incesantes por toda la periferia capillense, su cuerpo fue hallado en un sector rural de difícil acceso cerca de un basural y con signos de violencia física.
Luego de una serie de investigaciones quedó como único acusado Lucas Bustos, un joven cuyo domicilio se ubica cerca de la zona donde encontraron el cuerpo de Cecilia.
El joven de 24 años se encuentra detenido desde fines de abril de 2020 en la Cárcel de Cruz del Eje a cargo del Servicio Penitenciario de la provincia, acusado por los delitos de “abuso sexual con acceso carnal y homicidio doblemente calificado por violencia de género y criminis causa”.
Para el entorno familiar, Bustos se trataría solo de un «Perejil», rememorando al acusado del crimen de Nora Dalmasso en la ciudad de Río Cuarto en el años 2006, cuando se acusó del hecho al pintor, que luego fue absuelto por falta de pruebas.
Tanto la familia como el equipo de trabajo que pide justicia por Cecilia, creen que se debe investigar mas sobre la persona responsable de alquilarle el espacio donde moraba la joven en Capilla del Monte y que la fiscal ya indagara en calidad de testigo, se trata de Mario Gabriel Mainardi, que además de alojar a Cecilia en Capilla del Monte en su casa, es la última persona en verla con vida y tener contacto con la joven asesinada antes de su desaparición el 5 de abril de 2020, en el arranque de las restricciones por la pandemia que aún persiste en el mundo.
Según relata la familia, no hay ninguna prueba en su contra, y la fiscalía se niega a avanzar en otras líneas investigativas. Pidieron por un Estado presente para asegurar que haya verdad y justicia. pic.twitter.com/SYPCeCezlZ
— Horacio Pietragalla Corti (@pietragallahora) October 6, 2020
Secretaría de Derechos Humanos
El secretarío de Derechos Humanos de la Nación Horacio César Pietragalla Corti, recibió en su momento a los padres de Cecilia y a través de un comunicado, resumió: «El joven Lucas Bustos es el único imputado y detenido, pese a que no existe en el expediente ninguna prueba fehaciente de que haya estado en contacto con la víctima».
Además, sostuvo: «La única evidencia que pesa sobre el acusado es una supuesta confesión realizada en una comisaría, cuyos únicos testigos son dos agentes a quienes Bustos denunció por torturas. Luego de ese hecho, y ya en sede judicial, el joven negó haber sido el autor del femicidio».
En este comunicado también solicitaron que se «profundice la investigación respecto de Mario Mainardi», la última persona que la vio viva, en coincidencia con lo que piensa el entorno de Cecilia.