España y Francia son los países que sufren una nueva ola de calor «excepcional» con temperaturas superiores a los 40 grados, al tiempo que en Portugal la situación se replica con incendios forestales que arrasaron el centro del país, se informó hoy.
En Europa, los termómetros volvieron a registrar niveles excepcionales de temperaturas, lo que, según los científicos, es una consecuencia directa del calentamiento global, ya que las emisiones de gases de efecto invernadero aumentan la intensidad, duración y frecuencia de estos fenómenos, consignó la agencia AFP.
En España, por la tarde se registró una temperatura máxima de 43,3 grados en el municipio de Candeleda (Ávila) seguida por 42,5 grados en la ciudad de Sevilla (Andalucía), mientras que el termómetro superó los 42 grados en ciudades del sur y suroeste como Jaén, Badajoz, Mérida y Córdoba, según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).
Esta nueva ola de calor, la segunda en un mes, «tiene vistos de ser excepcional», incluso en un país acostumbrado a las temperaturas elevadas en verano, advirtió hoy el portavoz de la Aemet, Rubén del Campo.
Si bien comenzó el domingo, podría durar «más de nueve o 10 días, y eso haría que fuese una de las tres olas de calor más largas que hemos tenido en España desde 1975», señaló Del Campo, ya que «el cambio climático hace que las olas de calor sean más frecuentes y sean cada vez más intensas».
A su vez, la Aemet señaló que «lo peor se espera entre martes y jueves», y no obstante indicó no estar en condiciones de asegurar si el récord absoluto de temperatura registrado en ese país (47,4 grados en Montoro durante 2021) podría ser superado.
España, que sufre de una pronunciada falta de precipitaciones desde el invierno, registró cinco episodios de temperaturas excepcionalmente altas los últimos once meses, al tiempo que mayo fue el más caluroso desde principios de siglo en el país.
En cuanto a Portugal, se registraron 44 grados en algunas zonas durante el fin de semana, y si bien las temperaturas bajaron ligeramente el lunes, volvieron a subir el martes y el miércoles, lo que favoreció los incendios sobre todo en el centro del país.
El mayor de ellos, en la ciudad céntrica de Ourém, fue contenido luego de quemar 2.000 hectáreas de vegetación, pero la situación sigue siendo «grave y excepcional», señaló el comandante nacional de Protección Civil, André Fernandes.
Por otro lado, en el suroeste de Francia las temperaturas sobrepasarán los 30 grados y este episodio meteorológico debería probablemente alcanzar su pico «entre sábado y martes próximos», precisó Sébastien Léas, de Météo-France, quien dijo que es aún temprano para decir si podría compararse con la ola de calor del verano de 2003, que dejó miles de muertos.
Por último, en Reino Unido, donde las temperaturas alcanzarán los 33 grados entre hoy y mañana en el suroeste del país, el servicio nacional de meteorología lanzó un alerta naranja para advertir de una ola de «calor extremo» a partir del domingo. ||| Info: Télam Imagen: La Voz de Galicia