Como consecuencia de la floja campaña en el torneo local, donde el equipo ve escapar sus posibilidades y la eliminación de la copa Libertadores a manos del equipo brasileño, el Concejo del fútbol de Boca, habría decidido el alejamiento del experimentado técnico de 65 años, Miguel Angel Russo, su reemplazante sería El técnico argentino Almirón quien se desvinculó del Elche, equipo Valenciano que milita en la Liga Española de Fútbol.
La seguidilla de resultados adversos, con un arranque atípico en la LPF, colocaron en una situación incómoda al director técnico que obtuvo la última Copa Libertadores para la institución xeneize, allá por 2007.
Con apenas 4 puntos en la tabla sobre 18 posibles, el elenco auriazul ocupa una inusual 24ta. colocación, sobre 26 equipos participantes en el certamen. Además, el equipo igualó su peor racha histórica (de 1957) y se mantiene sin ganar en 10 encuentros oficiales.
Más temprano, el presidente del club, Jorge Amor Ameal, había deslizado su apoyo a la continuidad de Russo en el puesto. Otro vocero xeneize consultado había marcado que “Jorge (Ameal) quiere que Miguel (Russo) siga en el cargo. Hasta hubo un llamado telefónico expresando el respaldo”, le contó a la agencia otro portavoz consultado.
Sin embargo, la opinión del máximo ídolo del club, JRR, terminó imponiéndose, para darle razón a una expresión lanzada por otro directivo de la entidad que sostuvo que “cuando uno firma un acuerdo de palabra con Román (Riquelme) para que maneje el fútbol. Se sabe que es él quien ostenta la última palabra en este tema”.
Todavía existe incertidumbre respecto de si Russo concurrirá este martes al predio deportivo de Ezeiza para despedirse de sus ahora, exdirigidos, o bien mantendrá “una charla telefónica” con los integrantes del CF para finiquitar la situación económica que trae aparejado este despido.
Russo había llegado en este segundo ciclo en la institución, a principios del año pasado, para sustituir a Gustavo Alfaro. El exDT de San Lorenzo, Estudiantes de La Plata, Lanús, Rosario Central y Vélez, entre muchos otros clubes, condujo los últimos siete partidos en los que el equipo xeneize experimentó una buena arremetida para ganarle la Superliga a River Plate, en marzo de 2020.
Luego, el entrenador dirigió al elenco que se consagró en enero pasado campeón en la Copa Diego Maradona, tras derrotar en los penales a Banfield, en una final disputada en la ciudad de San Juan, que terminó empatada (1-1).
Tras la derrota del domingo pasado ante Estudiantes en La Plata (0-1), el plantel xeneize deberá entrenarse este martes desde las 9.30, a las órdenes de Battaglia.
El equipo se medirá el sábado a las 20.15 con Patronato de Paraná, en la Bombonera, por la séptima fecha del torneo.