El fenómeno climática La Niña, que implica una menor cantidad de lluvia caída tanto en Argentina como en los demás países de Sudamérica, ingresó en el último período en un «proceso de disipación» tras más de dos años consecutivos de afectar a la región, señalo hoy un informe elaborado por la Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA).
«Después de más de dos años de afectar negativamente el funcionamiento del sistema climático, el fenómeno de ‘La Niña’ está dando muestras de haber entrado en su proceso de disipación», indicó el BCBA en su informe de Perspectivas Agroclimáticas Estacional.
El trabajo publicado por el entidad bursátil sostuvo que «el sistema climático evoluciona positivamente, alejando de una tercera La Niña consecutiva, pero la transición será lenta y mostrará perturbaciones hasta mediados del verano 2023».
Así, en el corto plazo «esta tendencia favorece un mejor transporte de humedad desde la Amazonia y el Océano Atlántico hacia el interior del Cono Sur, favoreciendo la reactivación de las lluvias y la moderación de las temperaturas».
En el mediano y largo plazo, el cambio operado «aleja el riesgo de un tercer episodio consecutivo de “La Niña”, a la vez que fortalece la transición hacia un estado “Neutral”, con posibilidad que, hacia mediados de 2023, se inicie un evento de “El Niño”, que beneficiaría a la campaña 2023/2024, apuntó la BCBA.
No obstante, «como era de esperarse, el proceso de transición es lento, de manera que las perturbaciones negativas continuarán hasta mediados del verano 2023, haciendo necesarios una planificación prudente, un manejo riguroso y un uso racional de la tecnología disponible», advirtió la entidad.
Respecto a esto, durante el período estival se experimentará un progresivo calentamiento, pasando de un “Neutral Frío “, al comienzo del proceso, a un “Neutral Absoluto” (Anomalía Nula), al final de la estación, a lo que se unirá una actividad de los vientos polares menor a la que tuvieron en las temporadas anteriores.
Es por eso que «las precipitaciones irán tomando continuidad, mejorando las reservas de humedad de los suelos, y moderando la intensidad de las olas de calor».
En lo que respecta al otoño próximo, el informe advierte que se registrará un calentamiento dentro del rango “Neutral Cálido”, lo que determinaría que los vientos polares se mantengan en su rango normal, por lo que «podría arribarse a un estado de El Niño hacia mediados de 2023«, con una cantidad de lluvias.
Fuente: Télam